Conoce más sobre la nueva era del comercio electrónico: BigCommerce

El comercio electrónico (o eCommerce) es la compraventa de bienes o de servicios en Internet. Abarca una amplia variedad de datos, sistemas y herramientas para compradores y vendedores online, incluidas las compras a través de dispositivos móviles y el cifrado de pagos online. La mayoría de las empresas con presencia online utilizan una tienda o plataforma online para llevar a cabo actividades de marketing y ventas de comercio electrónico, así como para supervisar la logística y el cumplimiento. Como norma general, existen siete modelos principales de comercio electrónico en los que las empresas se pueden clasificar:
- B2C: abarca las transacciones realizadas entre una empresa y un consumidor, por ejemplo, cuando compras unos zapatos en una tienda online, estás haciendo una transacción de comercio electrónico de empresa a consumidor.
- B2B: se refiere a las ventas realizadas entre empresas, como entre un fabricante y un mayorista o minorista, el comercio electrónico de consumidor a consumidor, está relacionado con la venta de productos o servicios entre particulares.
- C2C: designa a las empresas que venden productos directamente al cliente final en lugar de hacerlo a través de un minorista, un distribuidor o un mayorista.
- D2C: cualquier consumidor puede poner sus productos o servicios a disposición de compradores empresariales.
- C2B: cubre las transacciones realizadas entre empresas online y administraciones. Un ejemplo serían los productos y servicios relacionados con documentos legales, seguridad social, etc.
- B2A: cubre las transacciones realizadas entre empresas online y administraciones. Un ejemplo serían los productos y servicios relacionados con documentos legales, seguridad social, etc.
- C2A: C2A es similar al B2A, pero en este caso son los consumidores los que venden productos o servicios a la administración. C2A puede incluir servicios de consultoría para educación, de preparación de impuestos, etc
Crecimiento del comercio electrónico
El comercio electrónico ha recorrido un largo camino desde el lanzamiento de CompuServe en 1969. Impulsado por los cambios en la tecnología y la situación mundial, el comercio electrónico está creciendo y no muestra signos de detenerse.
- Se espera que las ventas en tiendas online alcancen el 22 % de las ventas minoristas a nivel mundial en 2023, frente al 14,1 % en 2019.
- Se calcula que en 2024 los monederos digitales representarán más de la mitad del volumen total de pagos del comercio electrónico.
Amazon representará el 39,5 % de todas las ventas de comercio electrónico en Estados Unidos en 2022, es decir, prácticamente dos de cada cinco dólares gastados online.
El impacto del comercio electrónico es muy extenso, afectando tanto a las pequeñas empresas como a las multinacionales. Para muchos minoristas, el crecimiento del comercio electrónico supone ampliar el alcance de sus marcas y repercute positivamente en sus resultados. Aquellos que han abrazado tarde el mercado online son los que ahora se enfrentan a los mayores retos. En febrero de 2019, las ventas en línea superaron por poco a las tiendas de bienes de consumo generales por primera vez, incluidas las grandes superficies, los almacenes con afiliación y los hipermercados. Y desde que Amazon Prime eliminó el coste del envío, más consumidores se sienten cómodos con las compras online, lo que significa que a los grandes minoristas no les queda más remedio que digitalizarse.
Para muchas pequeñas empresas, la adopción del comercio electrónico ha sido un proceso lento. Sin embargo, quienes se suman a él acaban por descubrir que el comercio electrónico les abre las puertas a un mundo de nuevas oportunidades. Poco a poco, los propietarios de pequeñas empresas están abriendo más tiendas de comercio electrónico y diversificando su oferta, llegando a más clientes y adaptándose mejor a los que prefieren las compras online o a través del móvil. No obstante, con las ventas de comercio electrónico creciendo año tras año y con una de cada cuatro pequeñas empresas fuera del comercio online, sigue habiendo una gran oportunidad para que los empresarios ganen en competitividad y amplíen sus negocios online.
El auge de los mercados de comercio electrónico.
Los mercados online van en aumento desde mediados de los años 90 con el lanzamiento de los gigantes que conocemos en la actualidad, como Amazon, Alibaba, etc. Amazon en particular es conocido por su estrategia de crecimiento única gracias a la cual han logrado una adopción masiva y unas ventas récord. Al ofrecer a sus clientes una amplia selección y una comodidad extrema, han logrado crecer rápidamente por medio de la innovación y la optimización constantes. Pero Amazon no hace esto solo. En el cuarto trimestre de 2021, el 56 % de los productos adquiridos a Amazon fueron ventas realizadas por terceros (es decir, no por Amazon).
Las redes sociales permiten a los consumidores compartir fácilmente productos para la compra online.
Hoy en día, los compradores de comercio electrónico pueden descubrir nuevos productos y servicios y se dejan influir para comprarlos por las recomendaciones que reciben de amigos, compañeros u otras fuentes en las que confían (como un influencer) a través de las redes sociales. Muchas redes sociales están empezando a ofrecer funciones de comercio electrónico, como el pago a través de la aplicación, las publicaciones con posibilidad de compra y los botones «Comprar ahora» que llevan a los usuarios directamente a la página de productos de una marca.
Ventajas del comercio electrónico
El comercio electrónico tiene muchas y diversas ventajas, desde compras más rápidas hasta la capacidad de llegar a grandes públicos objetivo de forma ininterrumpida. Veamos en detalle algunas de las principales ventajas que ofrece el comercio electrónico.
- Compras más rápidas para los clientes: Desde el punto de vista del cliente, el comercio electrónico le permite comprar desde cualquier lugar y en cualquier momento. Eso significa que los compradores pueden obtener los productos que desean o necesitan más rápido sin verse limitados por los horarios de apertura de una tienda tradicional. Además, con las mejoras en los envíos, que ponen servicios de entrega rápida a disposición de los clientes, incluso el tiempo de espera desde que se hace el pedido hasta que se recibe puede ser mínimo (piensa en Amazon Prime Now, por ejemplo).
- Las empresas pueden llegar fácilmente a nuevos clientes: El comercio electrónico también facilita que las empresas lleguen a nuevos clientes a nivel mundial. Una tienda de comercio electrónico no está vinculada a una única ubicación geográfica, está abierta y disponible para todos los visitantes online. Con las ventajas añadidas de la publicidad en las redes sociales, el marketing por correo electrónico y la optimización para motores de búsqueda (SEO), las marcas tienen el potencial de conectar con enormes audiencias objetivo dispuestas a comprar.
- Costes operativos más bajos: Sin la necesidad de un tienda física (ni empleados para hacerla funcionar), los minoristas de comercio electrónico pueden abrir tiendas con costes operativos mínimos. E incluso aquellos que tienen un negocio de envío directo pueden minimizar los costes de inversión inicial. A medida que aumentan las ventas, las marcas pueden ampliar fácilmente sus operaciones sin tener que hacer grandes inversiones inmobiliarias o contratar a una plantilla muy amplia, lo que se traduce en mayores beneficios totales.
- Experiencias personalizadas: Con la ayuda de la automatización y los perfiles de clientes enriquecidos, puedes ofrecer experiencias online altamente personalizadas para tu base de clientes de comercio electrónico. Mostrando productos relevantes basados en el comportamiento de compra anterior, por ejemplo, puedes aumentar el valor medio de los pedidos (AOV) y hacer que el comprador sienta que realmente entiendes sus necesidades individuales.
- Acceso a las nuevas tecnologías: Es posible que tus opciones sean limitadas en lo que respecta a la innovación si únicamente dispones de una tienda física. Sin embargo, a medida que el ecosistema del comercio electrónico siga madurando y mejorando, tu empresa tendrá acceso a las tecnologías más avanzadas con las que podrás optimizar los procesos empresariales. Con una gran variedad de aplicaciones e integraciones a tu alcance, podrás mejorar los flujos de trabajo, llevar a cabo más eficazmente tu estrategia de marketing y mejorar la experiencia de compra en general.
Conclusión:
Si hacemos caso a Statista, se espera que los ingresos del comercio electrónico sigan creciendo anualmente a un ritmo del 14,56 %, lo que se traduce en un volumen de mercado previsto de 1365 millones de dólares para 2025, lo que demuestra que el comercio electrónico no es una moda pasajera.
Especialmente con el aumento de las experiencias de compra omnicanal, los consumidores digitales esperan poder investigar, navegar y comprar fácilmente entre diferentes dispositivos y en varias plataformas de comercio.
Otras tendencias a tener en cuenta en el futuro del comercio electrónico incluyen:
- Personalización y trayectorias sólidas del cliente.
- Compras habilitadas por inteligencia artificial.
- Compras a través de las redes sociales.
- Comercio móvil.
- El dinero digital, como los monederos móviles y las criptomonedas.
En general, debemos recordar que el comercio electrónico todavía es bastante nuevo en el panorama general del comercio minorista. El futuro ofrece infinitas oportunidades, pero su éxito y continuidad dependerán en gran medida de las preferencias de los compradores en el futuro.
Referencias: